Guardaste en tu corazón sirenas, conchas y acordes al sol.
Y un día como hoy sentiste por la piel que un corazón volvía a latir.
¿Será que el paso de aquella estrella te devolvió la vida?…
Siempre buscando una vida,
una condena perdida
en la quietud de un tiempo prohibitivo.
Del absurdo equipaje de una vida sin vida,
de una flor marchita podrida por la ponzoña.
No he sentido mi paciencia perdida,
ni mi conciencia barrida
por el mugriento sentido de nuestra loquísima inconsciencia.
¿Dónde te has metido?
Quisiera poder mirar a la luz gris de la luna
¿Dónde te has metido?
Quisiera poder mirar a la luz gris de la luna
para poder alcanzar todos esos sueños,
todos los que me deparan los poderes ocultos,
los que abogan por descubrirnos, a mí, a ti.
Nadie nos hará más fuertes que tú y yo, un solo corazón.
los que abogan por descubrirnos, a mí, a ti.
Nadie nos hará más fuertes que tú y yo, un solo corazón.
Es la razón que ellos nunca entenderán.
De la inconsciente rutina,
De la inconsciente rutina,
de la intensa vorágine…al calor infinito,
a lo oculto, a lo misterioso… histérico,
irrisorio, inédito, extraño, oculto, errático…
de nosotros dos.
Las cosas que podemos ofrecer,
Las cosas que podemos ofrecer,
siempre seguirán marcadas en nuestra piel.
Si te gusta comparte:
- Haz clic para compartir en WhatsApp (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Pinterest (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Tumblr (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Telegram (Se abre en una ventana nueva)
Gustavo como siempre un crack. Magnífico amigo gracias por tu aportación un abrazo
Un placer como siempre