¿Quién alimentará el odio
en la cuenca de mis ojos?
¿Quién acabará en desidia?
¡La Virgen de la Traviesa!
Hay que ir despertando
la tontería no se aleja
los fantoches que ordenan
se quedan en la barrera
y los que agachan el corvejón
van directos a la paleta.
Soledad de agujeros negros
bandoleras ondean al viento
y obstruyen la razón
porque no les llega la sangre
ni a mitad del occipucio.
El perro se queda en la puerta
el perro come
lo que hay bajo la mesa.
El amo manda y se esconde
y tú le barres la mierda.
Gustavo García Pradillo