Inhertes madrugadas
me sobrellevaron por décadas,
inmersa en subvida de relegación.
Pospuesta en la penumbra de horas eternas, arrastrada por la absurda abnegación.
Profundas quebradas fueron ruta obligada, magullada en la esencia
sin brillo del sol…
En una mirada esquiva
tras los cristales,
vi un reprochable reflejo; mi irreconocible figura,
casi sin color…
Estremecida ante la ausencia
del latido constante,
urgué en los cajones
de mi dormida ilusión.
Un destello de estrellas
iluminó mi sombría memoria,
Y cambié mi cordura
por sueños y magia dibujados en los versos
que escribo con pasión.
¿Cómo no seguir
creando mundos alternos con letras encantadas?
Si en este fluir de tinta encontré un profundo amor.
Viviana Lizana Urbina
Que siga fluyendo el amor en la magia de tus letras querida Viviana!!!
Besos todos preciosa amiga.
Muchas gracias, querida Marina.
Besos.
ME GUSTA
Muy amable, muchas gracias.
Que siga y que dure! Muy bello, Viviana
¡Muchas gracias, Marina!
A ti?