Vino buscando un lugar
Donde en su vida poder habitar
Y vivir en paz.
Huyó de su tierra
Para llegar a cualquier lugar
Y no olvidar.
Izó las velas y navegó
Surcando los mares de aquí y allá,
Pero la luna implora su lealtad,
En la noche le recuerda su amor,
Que él nunca fingió.
Quiso escapar
Surcando el viento y la tempestad,
Quiso evitar
Que sus ojos vaciasen el mar,
A su voluntad.
Y se encontró
Con una guerra que nunca entendió,
Una lucha de cobarde ambición,
Que ahora sabe que pronto acabará
Con su triste y vil rendición.
Hoy la muerte vigila su error,
Pues su mente irradia ilusión,
Un alma más
A la que infligir su castigo, dolor.
Nunca pensó
Que la vida albergara traición
Rompiéndole el corazón.
Hoy con razón,
Su pensamiento y su tesón:
Regresar a su hogar,
Donde nunca hubo de escapar.
Y besarla una vez más.
Y abrazarla una vez más.
La sangre fluye a raudales
Por el mar de la melancolía.
En sus ojos brilla la tristeza
De quien se siente un alma «perdía»,
Naufragando entre los bancales
De este barco que no flota,
Cuando un alma camina rota
Hundiéndose sin remedio
En el pozo más profundo
Perseguida por la muerte,
Muerto ya,
Viviente,
Por haber vuelto a perderte.
Sensacional Gus!!! Besazos muchos guspísimo!!!
Muchas Gracias Marina. Los besos como Siempre, de vuelta.