Podríamos disimular y hacer como que ni nos miramos.
Y aun así provocaríamos el momento de entrecruzar nuestras miradas.
Sonreir de soslayo.
Palpitar con más prisa.
Llegar al llanto en caso de que tu partida se acercara, antes de lo esperado.
Desearía hacer entender a los del pasado.
Que tú, no estabas predispuesto.
Que yo, ni lo había soñado.
Volvió.
Sería cuestión de no discutir lo indiscutible.
Explicarnos.
Existe un lazo.
Ese que une las manos.
Que cose los corazones, que una vez se amaron.
Y estén donde estén, se saben unidos.
Jamás están separados.
Pocos son los conocedores, de tal poder, muchos los agraciados.
Rebusca en tu mano, mira en los recuerdos, ¿a quién te une ese lazo?
By Miriam Giménez Porcel.
Sabemos lo que somos, pero no lo que podemos llegar a ser.
Busca entre mis letras. Así soy yo.
Precioso lazo. Bonitos sentimientos. Me encanta el poema.
Muchisimas gracias Luisjuli2. Todos tenemos ese lazo, únicamente se trata de ser sincero con uno mismo y realmente saber ¿a quién nos une?