Percepciones que nos dicen que la realidad se duerme entre las sombras mientras nuestros sueños quedan varados en el tiempo.
Para nada amigos, levantarse es obligado y danzar si es necesario, mientras el día sea luz y noche sombra, si el latido hace eco y reverbera, entonces los sueños despiertan y la vida sigue, el paraíso buscado, es nuestra vida, el caminar incierto cuyo rumbo a veces perdemos es nuestro sino.
Dejar a las ratas en la vereda apremia mientras despiertos soñamos viviendo el momento de nuestro triunfo.
Marijose.-
Amén 🙂
🙂